… por todo lo genuino y bueno que conlleva este intento:
¡Que todos los seres gocen de la felicidad y de las causas de la felicidad! ¡Que se liberen del sufrimiento y de las causas del sufrimiento! ¡Que no se separen nunca de la gran felicidad en la que no hay sufrimiento! ¡Que permanezcan en la gran ecuanimidad, libres de apego y aversión!
Y que a partir de este momento y a cada instante, todo sea más auspicioso en toda existencia.